domingo, 16 de octubre de 2011


Cometí errores, lloré por quién no debía y reí con falsas amistades. Perdoné demasiado, callé "te quieros" por miedo y verdades por no hacer daño. He abrazado a la persona que pensé que nunca me haría mal y me he dado cuenta de que esa persona no se merecía ni el roce. Descubrí que el paraíso puede encontrarse en el tacto de una piel, y que los besos pueden hacerte volar. Disfruté de pequeños detalles, y aprendí poco a poco en qué consiste la vida.

1 comentario:

  1. Ya te sigo enfermita, vos me seguís? si no lo haces, seguime! un xoxo, te amo bye.

    ResponderEliminar